PISTIS SOFÍA, 139.5, Los castigos de Paraplex

PISTIS SOFÍA, 139.5, Los castigos de Paraplex

Texto original de Pistis Sofía y su respectiva develación

139.5 Los castigos de Paraplex

Texto original

En aquel tiempo la autoridad de nombre Paraplex, juntamente con los demonios que están bajo sus órdenes se llevó las almas de los apasionados violentos, de los maldicientes y de los asesinos y las destruyó con su oscuro humo y su maligno fuego, para que empezaran a deshacerse y a disolverse. Durante ciento treinta y tres años y nueve meses permanecieron en los castigos de las regiones de ella, mientras las atormentaba con el fuego de su perversidad.

Develación del V. M. K. Arkaom Zanoni Phidluz, El Tawa Manú

La cifra kabalística del período de castigo que deben padecer las almas en la región de Paraplex, da la clave de la carta 16 de la Metrología (1+3+3+9=16), debiendo colegirse aquí que los regidores rebeldes son sometidos por sus crímenes y maldiciones a padecer su completa disolución como torres fulminadas.

Texto original

Y aconteció que después de todos estos tiempos, y cuando la esfera giró sobre sí misma y el Pequeño Sabaoth, Zeus, vino al primero de los eones de la esfera, la que es llamada en el mundo el Ariete de Boubastis, es decir, de Afrodita y cuando ésta llegó a la séptima casa de la esfera, es decir al balance, los velos que están entre aquéllos de la Derecha y aquéllos de la Izquierda se apartaron, y apareció en las alturas de aquéllos de la Derecha el Gran Sabaoth, el Magnánimo; y todo el mundo y el total de la esfera se alarmó, antes de que él las mirara. Y él miró hacia abajo, hacia las regiones de Paraplex, para disolver sus regiones y hacerlas perecer. Y todas las Almas que estaban en sus castigos fueron devueltas de nuevo arriba, a la esfera, porque habían sido dañadas en los castigos de Paraplex.

Develación del V. M. K. Arkaom Zanoni Phidluz, El Tawa Manú

Resulta que, cuando el Microcosmos Humano entra en gran movimiento produciendo su Auto-Realización, deviene el nacimiento del Dios Sol en su naturaleza corporal, porque ha sabido ejecutar la Obra de Misterios Menores con el Pequeño Sabaoth, que en este caso es la Sustancia Mercurial operada por Júpiter para lograr la Concepción Divinal, la que se obtiene en ardua brega con Marte transformando el núcleo lunar, cuando gracias a la virtud del Amor se deja el vicio terrícola del bobo entorno fornicario, apelando paralelamente al poder purificador de Saturno.

Es gracias a la hoz maravillosa como se siega de raíz el mal acumulado en el interior psicológico, determinándose así la cancelación de toda deuda karmática.

Eliminado el defecto o ego en su totalidad pluralizada, el Iniciado se encuentra más allá de todo raciocinio formal, por lo que los linderos entre Bien y mal desaparecen como meros conceptos, dando paso a la Gran Realidad, surgiendo por consiguiente, el Gran Sabaoth, el Kristificado de Misterios Mayores, el Magnánimo que limpia al pecador de todo mal y perdona toda trasgresión, con la condición de no reincidir en malsanas prácticas.

Y cuando se está produciendo este trascendental paso, como toda metamorfosis, y aún más aquí se trata de una Súper Mutación, es una verdadera conmoción psico-físico-orgánica que se produce al interior del Resurrecto, por lo que todos cuantos se hallan alrededor de éste, máxime si son familiares, vecinos y/o amigos, se alarman sobremanera por lo incomprensible de tal suceso, llegando a reaccionar casi siempre en forma negativa y cruel.

Jeú Mikael interviene pues misericordioso en favor de cuantos seres arrepentidos se hallen bajo el dominio de Paraplex, enviando los fulminantes fulgores que emite su Par (Thunupa) para disolver las regiones purgatoriales íntimas del pecador, a fin de que sus almas sean rescatadas y reacondicionadas con la Gran Obra para superar los daños sufridos en los castigos.